El Solsticio de Invierno

El Solsticio de Invierno

El 21 de diciembre marca el inicio del invierno, la noche más larga del año y el día más corto de toda la rueda solar. La energía solar que llega a la tierra es mínima y ello marca el inicio del invierno.

Desde la antigüedad se ha celebrado en diferentes culturas esta fecha como la fecha del nacimiento del Dios Sol, la época en el que la luz vence a la oscuridad pues el poder de la noche ha alcanzado su máximo poder en este día y desde la fecha marcada como el solsticio de invierno, el Sol comienza a adquirir mayor fortaleza, los días se hacen más largos y las noches más cortas.

Numerosas son las culturas que hablan del nacimiento del Salvador como fruto de una virgen entre los días 20 y 25 de diciembre, fecha del solsticio de invierno también llamada “La puerta de los Dioses”. Ello dio el origen de la actual Navidad.

La palabra Navidad, tiene su origen de la palabra latina ”Nativitas” que significa nacimiento como referencia al nacimiento de Cristo. Fue en el año 336 cuando el Emperador Constantino marcó esta fecha en el calendario para hacer más fácil la conversión de los paganos al cristianismo.

Y ¿por qué te cuento toda esta información? Es importante recordar nuestros orígenes conectados a los ciclos vitales de la tierra y la naturaleza que a lo largo de la historia han marcado nuestro calendario, como podemos ver en la celebración de la Navidad, San Juan o Semana Santa.

Del mismo modo que el calendario, marcando los ritmos y ciclos de la vida y la naturaleza, el ser humano también tiene sus ciclos los cuales es importante respetar.

¿A qué nos invita el solsticio de invierno? Esta época es una época de recogimiento, de reflexión, de interiorización, los animales se sumergen en sus cuevas para hibernar y guardar sus fuerzas durante el duro invierno para poder despertar llegada la primavera, fortalecidos y con nueva energía.

Esta es una época para hacer balance y valorar los frutos de la cosecha durante este año y cómo quieres proyectar tu futura cosecha en el próximo año. Es tiempo de nutrición y reflexión.

En los próximos días se hace una invitación masiva al consumismo, a la celebración y a la fiesta externa, alejándote de ese espacio sagrado interior que te reconforta.

Hoy te invito a seguir celebrando y compartiendo con aquellos a quienes amas y deseas te acompañen en estos días y también, te invito a buscar tus espacios de reflexión a sumergirte durante algunos instantes en ti para hacer tu balance interior ¿Qué quieres fortalecer? ¿Qué necesitas dejar descansar? ¿Qué aspectos de ti necesitan de tu atención y descanso? ¿Dónde quieres poner tu energía en el próximo año? ¿desde donde quieres moverte? ¿Qué quieres hacer nacer en ti?

Gracias por brindar tu tiempo para leer este espacio de reflexión.

Te deseo un feliz solsticio de invierno tan productivo que puedas sentir tu renacimiento, en esta época nace el dios que habita en tu interior, bríndate el espacio para ESCUCHAR SU VOZ.



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